Los Golden State Warriors, a poco más de tres semanas del desenlace de la temporada regular, se encuentran fuera de las posiciones de Playoffs. El conjunto de Steve Kerr acumula tres derrotas consecutivas y el tiempo corre en su contra. Pero, ¿qué les ha llevado hasta esta situación? Su versión fuera de casa, que nada tiene que ver con los Warriors que conocen en San Francisco.
A 19 de marzo de 2023, Golden State acumula un balance de 36 triunfos y 36 derrotas, registros que le han llevado hasta la séptima posición de la Conferencia Oeste. No obstante, dentro de estas cifras, la realidad es bien clara: los Warriors poseen dos versiones muy distintas. En casa, de los 30 equipos NBA, tan solo Denver (6) y Memphis (5) han perdido menos encuentros que el conjunto de Curry (7). Ahora bien, fuera de ella, la historia es la contraria.
Como visitantes, Golden State ha caído en los 11 últimos encuentros de forma consecutiva y posee un balance total de 7 victorias y 29 derrotas. Sólo hay dos conjuntos que han cosechado menos triunfos fuera de casa esta temporada: Houston y San Antonio, los dos últimos clasificados del Oeste. Esta diferencia entre el balance como local y visitante, según datos de Gonzalo Vázquez, no se veía desde los Nuggets de 1989, hace 34 años. Y es que esta misma razón es la que puede costarles el puesto en Playoffs.
De aquí a final de campaña, el equipo de Kerr disputará 10 partidos más. La mitad, lejos del Chase Center, ante Houston, Dallas, Denver, Sacramento y Portland. Parece evidente que, con la igualdad existente en la tabla, deberán sacar adelante alguna de estas citas.
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