Bravos de Margarita arrancó la temporada regular 2023-24 ganando apenas dos de sus primeros ocho compromisos en el mes de octubre. El panorama era muy desalentador para la tropa dirigida por José Moreno. Sobre él llovían críticas y se cernían dudas acerca de cuál sería su futuro con el devenir de la campaña.
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Una ofensiva que estaba bien armada desde el principio, pero un pitcheo totalmente deficiente y que incluso llegó a tener cuatro dígitos en su efectividad colectiva. El coach de pitcheo Giovanni Carrara, también estaba sobre el ojo del huracán. Había dudas sobre si este cuerpo técnico, que venía de triunfar en el invierno mexicano, podía estar a la altura de la LVBP.
Al parecer era cuestión de ir haciendo ajustes al cuerpo de monticulistas, que sumados a la consistencia que pudiera mantener la toletería, habrían de ser capaces de enderezar el rumbo de Bravos de Margarita. En el compromiso 55 llegó la victoria 30 de la temporada. La misma, finalmente los clasifica a playoffs por primera vez desde la temporada 2018-19.
Bajo el mote de “Máquina de Guerra”; propulsado por los propios jugadores y por los integrantes de su circuito radial. La definición, mejor imposible, con una ofensiva que rozó los .300 puntos durante todo trimestre; de hecho, fue la segunda mejor en promedio colectivo (.301).
Además, lideraron a todo el circuito en OBP (.390) y BABIP (.338 – colíder junto a Tiburones), lo que habla de una amenaza constante en las almohadillas.
Bravos terminó ganando 28 de sus últimos 47 choques, jugando para .596 en ese lapso. Es decir, el 93% llegaron entre noviembre y diciembre. Fruto del trabajo y no rendirse; algo que no debe hacerse en esta Liga.
Gerencia destacable pese a impase
Ahora bien, uno de los cuestionamientos de Bravos de Margarita en las últimas zafras ha sido su gerencia, que no ponía equipos competitivos en el terreno de juego. Incluso, el tétrico inicio de la contienda había agudizado mucho más dichos cuestionamientos.
Y sí, estamos hablando de la misma gerencia encabezada por José Manuel Fernández e Yves Hernández, que por poco pierde a figuras clave en el Draft de No Protegidos (Breyvic Valera y Wilson Ramos). Ello sin duda fue un impase muy grave para el tren ejecutivo al no ubicarlos en las listas correctas protección.
Cabe destacar que las adiciones que el club hizo durante la temporada baja representaron pilares dentro del roster: Wilson Ramos siendo un líder en la receptoría y aportando con el madero. Luis Pacheco ayudó en el bullpen, Félix Doubront sumó su experiencia al staff de abridores. Y, ni hablar de Osmer Morales, flamante ganador de la triple corona y gran candidato a ser Pitcher del Año.
Aunado a ellos, tampoco hay que restarle méritos a que el conjunto insular se movió para buscar importados que pudiesen reforzar el pitcheo y a otros que suplieran los fracasos que resultaron ser Jesús Balaguer y Gio Soto al principio de la zafra.
Importados cumplieron propósitos y Navas intratable en diciembre
Dylan Unsworth y Sandy Gastón cumplieron sus propósitos; aunque sus caminos no fuesen los mejores. El regreso de José Mesa Jr. fue un acierto, dando estabilidad en los capítulos finales. Y aunque Osman Gutiérrez fue bateado, pudo sacar outs claves.
Igualmente, hay que hablar de la mejoría de Carlos Navas, que como el equipo; fue yendo de menos a más. En sus primeras 17 apariciones dejó efectividad de 6.75 en 16 episodios de labor. Luego, bajó porcentaje de carreras limpias de 0.84 en 11 juegos y 10.2 innings lanzados en diciembre.
La defensa destacó como nunca
Es muy difícil en el béisbol venezolano medir cuanto contribuye la defensa a ganar partidos; sobre todo por la ausencia del sistema para utilizar las métricas avanzadas. Sin embargo, la defensiva de Bravos fue primera en porcentaje de fildeo (.986) y cometió la menor cantidad de errores entre los ocho equipos (28).
A lo largo del año pudimos ver grandes jugadas del equipo isleño, sobre todo en los jardines con Tomo Otosaka, que brinda una gran cobertura de terreno en el central. Alberto González, que siempre ha sido un guante bastante seguro, Breyvic Valera haciendo lo propio en segunda base y José Alexander Martínez en las paradas cortas. Muchos recuerdan su engarce para concretar el out 27 de un juego ante Leones en el Monumental. Y es que así fueron las intervenciones de la mayoría, claves para evitar males mayores.