Kylian Mbappé se unió a la selección de Francia para afrontar una nueva ventana de Eliminatorias europeas, pese a llegar condicionado por un golpe en el tobillo que sufrió con el Real Madrid y que lo entrenar apartado con su selección.
El combinado «galo» se entrenó en Clairefontaine a dos días de medirse contra Azerbaiyán en el Parque de los Príncipes (casa del PSG) y el jugador merengue no terminó el entrenamiento con sus compañeros pese a empezarlo junto a ellos.
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A los 15 minutos de haber comenzado con el grupo, el delantero se apartó para entrenarse diferenciado junto a Ibrahima Konaté y seguir el plan específico que le preparó el staff médico de la selección recuperarse de la lesión en el tobillo que sufrió el pasado sábado en el encuentro contra el Villarreal el pasado sábado. Tras haber realizado carrera continúa, el futbolista se colocó el abrigo y se retiró hacia los vestuarios.
En los primeros minutos pudo tocar la pelota e hizo varias carreras, pero a un ritmo suave y sin emplearse a fondo, consciente de que exigirse al máximo podría suponer una recaída de su lesión e nel tobillo.
En todo caso, Francia, aunque indicó que no presenta daño grave, pues, en todo caso, ya habría regresado con el Real Madrid, no planea arriesgar al atacante del club blanco para el compromiso del viernes, menos en un partido contra un rival que se ubica en el puesto 124 del Ranking FIFA, por lo que podría darle descanso el viernes si en estas últimas horas no se recupera.
El cuerpo médico de la escuadra subcampeona del mundo considera prematuro arriesgar a Mbappé a una sesión completa, pero también descarta su regreso a Madrid luego de examinar sus molestias.