La selección de Francia tuvo un partido difícil contra Azerbaiyán, pero terminó resolviéndolo por goleada 3-0 para seguir acercándose al Mundial de 2026, pues sigue comandando su sector con cierta comodidad.
El subcampeón del mundo se supo imponer en la primera mitad, pero no lograba acertar a portería. Dominaba, manejaba la pelota y llegaba al área, pero sin ocasiones de verdadero peligro. De hecho, solamente tuvo dos, una recién iniciado el partido y la otra justo sobre el final de los primeros 45, cuando apareció el golazo de Mbappé, quien ya tiene 10 encuentros consecutivos anotando, al quitarse a seis rivales, casi desde la mitad de la cancha y definir cruzado en una jugada «messiánica».
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Para la segunda etapa, las posturas no se modificaron. Azerbaiyán siguió con su buena defensa y los ‘galos’ sosteniendo la pelota en campo rival causándole preocupaciones. No obstante, al igual que en el primer tiempo, a Francia se le complicaba abrir el arco, algo que consiguió al minuto 68′ con asistencia de Mbappé a Rabiot.
La sentencia cayó cuando el partido entró en sus últimos 10 minutos, luego de que el recién ingresado Thauvin (quien regresó a la selección), en cambio por Mbappé (quien salió con molestias), controló un centro y la empalmó de volea para el 3-0 final.
Los de Didier Deschamps consiguieron su tercer triunfo en tres partidos, para llegar a nueve puntos y seguir afianzándose en los más alto del Grupo D, a cinco unidades de su máximo perseguidor (Ucrania) y acercándose más y más al Mundial 2026 con tres encuentros por delante.