No se puede creer la mala suerte que sigue teniendo Matteo Berrettini con las lesiones. Después de ganar el título en Marrakech, el italiano solo ha vuelto a disputar un partido, obligado a perderse Madrid y Roma. Más doloroso este último, donde dio la cara esta tarde para explicar su situación.
Una noticia triste
“Quería estar aquí para sentarme con ustedes y decirles personalmente que mañana no podré saltar a pista a jugar mi partido de primera ronda. Todavía no estoy listo para competir, no puedo dar lo mejor de mí dentro de la cancha. Lo intenté todo porque este torneo es muy importante para mí, pero en estos momentos tengo que dejar de lado a mi corazón y utilizar un poco más mi cerebro, pensar en lo que realmente es importante para mí, que en este caso es mi salud. No quiero volver a lesionarme, lo cual significaría volver a estar lejos de los torneos durante muchos meses”.
Promesa con Roma
“Con muchísima tristeza tengo que tomar la decisión de retirarme del torneo, lo único que pienso ahora mismo es en volver y competir aquí en 2025, donde espero que no pasa nada. Ese es mi mayor deseo, que dentro de doce meses no suceda nada raro, ojalá que no pase nada y pueda estar en pista. Lo siento mucho, no puedo estar más triste por verme obligado a retirarme”.
La suerte no le acompaña
“A veces he llegado a pensar que existe como un ritual vudú detrás de mí (risas). De verdad, es casi como una obsesión. En esos momentos es donde la parte racional se tiene que hacer cargo de todo, aunque resulta muy difícil aceptar este tipo de inconvenientes, en cualquier deporte o profesión, tropezar tantas veces de esta manera cuando tienes trazado un plan en tu mente. En nuestra cabeza estaba jugar en Múnich para preparar Madrid y Roma, pero todo se vino abajo. Es muy duro crear un plan, sentirte bien y luego tener que volver a casa. Es fácil perder confianza, al final la pregunta ya no es cómo jugarás, sino si jugarás. Tu enfoque cambia drásticamente y eso genera cansancio”.
Dispuesto a seguir peleando
“Uno puede llegar a perder muchísima energía en este pelea por mantener todo bajo control, tomando medicamentos, viendo cómo estás un día y luego cómo estás en el otro. A veces me siento agotado por arrastrar durante tanto tiempo esta situación. Lo que hago es detenerme un momento, aclarar mi mente y pensar si estoy dispuesto a enfrentarme a todo esto, porque lo que realmente me gusta hacer es jugar. Pero quiero seguir intentándolo, quiero hacer ese esfuerzo”.