En estos días se sigue andando en escritos y hablando del bateo de Luis Arráez de los Marlins de Miami. Mucho se anda apuntando de su continuidad con su bate desde el arranque de temporada y al ritmo que va posible llegue al cierre de la campaña regular con sobre .350 de promedio y quién sabe cuánto más.
Campaña tras campaña siempre se discute sobre el arte de batear sobre .300 de promedio en las Grandes Ligas. Pocos se han dado cuenta pero Arráez en cinco temporadas en su carrera en cuatro sus números hablan de .300 o más de promedio.
Esta temporada muchos andan aforando las posibilidades de que Arráez repita como campeón bate en las mayores. El año pasado fue el rey de bateo del circuito americano con .316 de promedio en la camisola de los Gemelos de Minnesota.
Este año entre latinos podría ser el primer campeón bate en la Liga Nacional desde el 2020 y el primero en el uniforme de los Marlins latino desde Hanley Ramírez en el 2009 en la camisa de Florida.
Mucho podemos seguir redactando sobre Luis Arráez pero una vez alguien dijo que el béisbol es de poco en la vida que tres de diez es algo de excelencia. En el béisbol bateas tres de diez consistente en una carrera y tienes la oportunidad de llegar al salón de la fama en Cooperstown. Una aseveración muy cierta cuando vemos que muchos de los que terminaron sus carreras con sobre .300 de promedio están hoy día inmortalizados en Cooperstown.
Mucho se puede argumentar pero ciertamente la tarea de .400 es todavía menos fácil. Como usual que re-visitamos la historia de los latinoamericanos en las mayores los dos salón de la fama latinos más cercanos a tocar esa cifra lo fueron Roberto Clemente en 1969 y Rod Carew en par de ocasiones en 1977 y 1983. Ambos transitaron por esa cifra en un son de alrededor de 80 partidos. Lo más increíble es que tanto Clemente en 1969 como Carew en 1983 no terminaron como reyes de bateo en sus respectivas ligas en tales mencionadas campañas. Probado que la tarea no es nada de fácil. Como que el último que coqueteo con tal cifra lo fue en 1941 Ted Williams al son de .406 de promedio.
Tocamos este tema porque en ese sonete estuvo Arráez en un momento dado en la primera mitad de campaña. Ahora bien, importante es que mantenga su actual ritmo de bateo. No solo por el campeonato de bateo sino mantenerse al instante que escribimos esta columna para continuar siendo uno de los tres latinos activos conectando en su carrera para .300 de promedio o más. En este momento que apuntamos esta columna los únicos dos jugadores activos con sobre tal cifra de .300 en su resumé lo son José Altuve y Miguel Cbarera.
Para aquellos amantes de la historia y fanáticos del béisbol aquí les ofrecemos la corta lista de sangre latina que conectaron o batean para .300 ó más de promedio en una carrera en las Grandes Ligas y ellos son:
Cuba- Tony Oliva (HOF)
Panama- Rod Carew (HOF)
Puerto Rico- Roberto Clemente (HOF), Edgar Martínez (HOF), Roberto Alomar (HOF)
República Dominicana- Vladimir Guerrero (HOF), Manny Ramírez, Mateo Alou, Manny Mota, Moises Alou, Pedro Guerrero
Venezuela- Magglio Ordoñez, Miguel Cabrera, José Altuve, Luis Arráez